Los documentos desvelados por OKDIARIO que han obligado al Rey a pagar 4 millones de euros a Hacienda
OKDIARIO desveló los documentos por los que ahora el Emérito ha tenido que pagar cuatro millones al fisco
El Rey emérito viajó en el jet privado para ver el Gran Premio de Bahrein de Fórmula 1
El fiscal suizo descubre una cuenta de Juan Carlos I en Ginebra a nombre de su primo y otros testaferros
El Rey Juan Carlos ha realizado una segunda regularización fiscal ante la Agencia Tributaria por recibir entre ocho y diez millones de euros en concepto de vuelos de una compañía de jet privados pagados hasta el 2018 por la fundación Zagatka. OKDIARIO desveló los documentos por los que ahora el Emérito ha tenido que pagar cuatro millones al fisco.
En diciembre de 2019 este periódico contó en exclusiva que Don Juan Carlos se desplazó a Bahrein para presenciar el Gran Premio de Fórmula 1 en un jet privado. El modelo era un Bombardier Challenger 605 del 2006 con capacidad para diez personas y que permite en su bodegas una carga de entre 12 y 15 maletas. La tripulación estaba formada por un piloto, su auxiliar de vuelo y una azafata.
Una de las ventajas del modelo 605 es que la cabina tiene una altura de 1,83 metros lo que facilitaba la movilidad de Don Juan Carlos que en aquellas fechas utilizaba bastón para poder caminar. Aunque el monarca mide 1,88 metros, la altura del fuselaje facilita un mejor movimiento por el interior del avión. Hay que tener en cuenta que la media de la mayoría de los jets es mucho menor.
El vuelo a la capital de Bahrain acordado por Álvaro de Orleans con la compañía AirPartner para Don Juan Carlos disponía de todos los lujos, de ahí que costara 125.000 euros. Las cláusulas del contrato con la compañía aérea británica incluían un «catering VIP», disponible en todas las horas de la duración del vuelo, y de «barra libre» para todos los ocupantes del Bombardier Challenger 605.
El jet privado despegó del aeropuerto de Torrejón de Madrid a las 9 de la mañana del 31 de marzo de 2016 y aterrizó en el aeropuerto de Bahrein a las 16,30, hora local. La duración del vuelo fue de 8,30 horas. Cuatro días después, el mismo Bombardier trasladó a Juan Carlos I desde el sultanato árabe al aeropuerto internacional de Abu Dhabi, la capital de los Emiratos Árabes, donde el ex monarca español permaneció tres días. Su regreso a España se produjo el 7 de abril a las 11 horas, aterrizando siete horas y media después en el aeropuerto de Torrejón.
Éste es uno de los viajes realizados por el Emérito y por el que ahora ha tenido que realizar la segunda regularización fiscal. Los vuelos fueron pagados por la fundación Zagatka, propiedad de Álvaro de Orleans. Los pagos se habrían realizado hasta el 2018, con posterioridad a la abdicación de Felipe VI en junio de 2014, momento en que Juan Carlos I perdió el privilegio de la inviolabilidad que tenía como jefe de Estado. El disfrute de estos vuelos se considera un pago en especie obligado a tributar como IRPF a Hacienda.
Fundación Zagatka
En febrero de 2020 el periodista Manuel Cerdán, que ha desvelado el Caso Majestad, reveló que los testaferros de Don Juan Carlos (su primo Álvaro de Orleans y los intermediarios Arturo Fasana y Dante Canonica) usaron la fundación Zagatka para ocultar su fortuna en el banco suizo Credit Suisse.
El fiscal suizo Yves Bertossa identificó la cuenta, con el número 0251-798208-9, que fue abierta por Arturo Fasana, como mánager de la sociedad Rhône Gestion, el 28 de julio de 2009, en representación de Zagatka, según se puede comprobar en el documento que reproduce OKDIARIO.
Para la Fiscalía helvética, la Fundación Zagatka, que fue constituida hace 17 años en Vaduz (la capital de Liechtenstein) por Álvaro de Orleans, habría servido todo ese tiempo como tapadera para ocultar el patrimonio en el extranjero del Rey Emérito.
En el contrato con el Credit Suisse figura la firma del fiduciario Fasana junto a la del representante del banco suizo. Este periódico ha podido cotejar la rúbrica del fiduciario de Ginebra con la de su documento de identidad, que aparece en el sumario de la operación Gürtel. En esa causa está imputado por blanquear el dinero de Francisco Correa a través de la conocida como «cuenta Soleado». Por medio de ella, que también fue abierta en el Credit Suisse de Ginebra, Fasana ocultó grandes cantidades de dinero de altas personalidades e influyentes hombres de negocios de España.
La mayor parte de los documentos en poder del fiscal Bertossa fueron incautados en el despacho de Rhône Gestión, en el número 2 de Boulevard Georges-Favon, junto al lago Leman de Ginebra. La investigación contra los testaferros de Don Juan Carlos fue abierta por la Fiscalía en agosto de 2018. El punto de partida fue la publicación en OKDIARIO de las confesiones de Corinna Say Wittgenstein, que habían sido grabadas subrepticiamente por el entonces comisario José Villarejo.
En las confesiones de Corinna Sayn Wittgenstein, grabadas por Villarejo en la residencia londinense de la princesa alemana, ésta ya reconocía el protagonismo de Álvaro de Orleans en los negocios de su primo el Rey Emérito. Corinna llegaba a afirmar: «Han puesto algunas cosas a nombre de su primo, que es Álvaro Orleans Borbón… Las cuentas de bancos en Suiza se han puesto a su nombre… Ahora están tratando que yo pase esas cosas a Álvaro a través de Dante (Canonica). Me están haciendo la guerra porque yo no quiero cometer un delito”.
Y concluía: “Es él (Álvaro de Orleans Borbón) quien paga hasta los vuelos (del Rey Juan Carlos) a Los Ángeles. Esos vuelos privados salen de Torrejón, de la zona militar, para no estar controlados…. Es él, Álvaro (De Orleans Borbón), quien los está pagando”.
Los documentos del Caso Majestad, instruidos por el fiscal suizo Yves Bertossa, desvelados por OKDIARIO, fueron el germen de la investigación abierta en España al Rey Juan Carlos I. Ésta se está llevado en la Fiscalía del Tribunal Supremo capitaneada por la ex ministra Dolores Delgado.